Había estado dándole vueltas a una respuesta para esta criatura inavisada; pero siguiendo los consejos de la Esfinge, me dije que es inútil perder energía en escuchar los pseudo argumentos de alguien completamente en la inopia respecto a su siglo. Lo malo de este lego, sin embargo, es que ante él no se puede decir lo que yo me solía susurrar con alivio frente a la pertinacia irracional de mi abuela, tipo cumplido de Bernarda Alba a no ser por la irrefrenable veta Lina Morgan que atravesaba todos sus desafueros histéricos: total, ella no va a gobernar el mundo. Porque el tipo dirige un periódico, ¿saben? Sí, sí,eso para lo que creíamos que había que poseer un lúcido sentido de la realidad.